"La discapacidad es algo que se tiene, algo añadido a la persona. algo dado". a partir de esta definición queremos hacer una reflexión sobre la discapacidad mental.
En la Constitución Española de 1978, donde se tratan los Derechos y Libertades, en su artículo 14 se afirma: "los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social." La consideración de igualdad de todos es un aspecto vital, así que aquellos que aunque “no parecen” iguales, son “igualmente” personas, seres humanos.
Para que estas personas se sientan iguales como todos los demás, se necesita la participación de toda la sociedad.
A veces se tratan como “inválido” (no válido). ¿Cómo puede aplicarse este término a una persona en cuanto persona? ¿Quién es “no válido” cómo persona?
También son llamados “minusválidos”, igualmente incorrecta. ¿Alguien por tener una discapacidad es menos válido como persona, es menos válido como ser humano? El valor de ser persona no depende de tener o no tener tal o cual capacidad o discapacidad. El valor de ser persona está sencillamente en eso, en el hecho de ser persona. Nada más. Todos somos iguales en cuanto personas, con o sin discapacidad.
La terminología que, a nuestro entender, mejor refleja la realidad es “personas con discapacidad”. El uso erróneo de palabras con significados negativo puede llegar falsamente a hacer creer que las personas con discapacidad necesitan dar lástima o que tengamos compasión de ellos. Nada de eso. Simplemente necesitan apoyo y ayuda en su vida diaria. ¿Y quién no necesita apoyo? ¿Quién no tiene alguna pequeña discapacidad? ¿Quién es perfecto?
Bueno espereramos que esto os haya hecho reflexionar un poco y empecemos a cambiar la forma de ver a estas personas, viéndolos solamente como personas iguales como nosotros.